Revolución quirúrgica en EE. UU.: primer trasplante de corazón totalmente robótico sin abrir el tórax

Houston, EE. UU. — En un avance sin precedentes para la cirugía cardiovascular, un equipo médico del Baylor St. Luke’s Medical Center, en Houston (Texas), ha realizado con éxito el primer trasplante de corazón totalmente asistido por robot sin necesidad de abrir el tórax del paciente. La intervención, llevada a cabo en marzo de 2025, marca un punto de inflexión en la historia de la medicina moderna y posiciona a la cirugía robótica como una alternativa real y segura frente a los métodos tradicionales.

Un cambio de paradigma en cirugía cardiaca

Hasta ahora, los trasplantes de corazón requerían una toracotomía completa o esternotomía, es decir, abrir el tórax y seccionar el esternón para acceder al corazón. Esta práctica, si bien efectiva, conlleva riesgos considerables: dolor postoperatorio, riesgo de infección, pérdida de sangre, tiempos de recuperación prolongados y posibles complicaciones respiratorias.

La nueva técnica desarrollada y ejecutada en Houston evita por completo la apertura del tórax, lo que representa un cambio radical en la forma en que se concibe la cirugía de trasplante. Esta innovación no solo mejora los resultados clínicos, sino que abre un camino hacia intervenciones menos invasivas, más precisas y con menores riesgos.

Tecnología y precisión al servicio de la vida

La intervención fue liderada por el Dr. Kenneth K. Liao, jefe del departamento de trasplante cardiotorácico y soporte circulatorio de Baylor. Utilizando el sistema robótico Da Vinci, se realizaron pequeñas incisiones en la zona abdominal —una de ellas de aproximadamente 12 centímetros— por donde se introdujeron brazos robóticos dotados de cámaras 3D e instrumentos microquirúrgicos articulados.

Desde una consola remota, el Dr. Liao guió con precisión milimétrica el retiro del corazón dañado y la implantación del nuevo órgano, todo ello sin romper huesos ni comprometer la integridad de la cavidad torácica. Esta aproximación innovadora minimiza el trauma quirúrgico y preserva intacta la estructura ósea del tórax.

Un paciente pionero en la historia

El receptor del trasplante fue Tony Rosales Ibarra, un hombre de 45 años originario de Lufkin, Texas. Tras sufrir una insuficiencia cardiaca avanzada agravada por un accidente cerebrovascular en 2022, Ibarra fue incluido en la lista de trasplantes en noviembre de 2024. Su anatomía, con un tórax de tamaño medio y un corazón agrandado, lo convirtió en un candidato idóneo para esta técnica menos invasiva.

La recuperación del paciente ha sido extraordinaria. Apenas un mes después de la intervención, Ibarra fue dado de alta sin complicaciones. En abril ya era capaz de conducir y realizar actividad física ligera, lo que representa un testimonio claro del impacto positivo de este nuevo enfoque quirúrgico.

Beneficios clínicos y ventajas médicas

Los principales beneficios del trasplante robótico sin apertura torácica son múltiples y significativos:

  • Reducción del trauma físico: la ausencia de incisiones en el esternón evita dolor postoperatorio severo y permite una recuperación más rápida.
  • Menor riesgo de infecciones: al no exponer la cavidad torácica, se reduce drásticamente la probabilidad de infecciones graves.
  • Preservación de la función respiratoria: la estructura torácica intacta favorece la respiración y la movilidad temprana.
  • Disminución de la pérdida de sangre: la técnica menos invasiva reduce la necesidad de transfusiones y sus riesgos asociados.
  • Alta tolerancia inmunológica: al requerir menos intervenciones agresivas, mejora la respuesta del cuerpo al nuevo órgano.

Declaraciones institucionales

El Dr. Liao señaló que evitar abrir el tórax representa una ventaja crucial en pacientes inmunodeprimidos, como los que reciben un trasplante, ya que permite una cicatrización más rápida y disminuye los riesgos postoperatorios. A su vez, el Dr. Todd Rosengart, presidente del Departamento de Cirugía, destacó que esta operación es una prueba tangible del compromiso del centro con la innovación médica de vanguardia.

El presidente del hospital, Bradley T. Lembcke, calificó la intervención como un “hito extraordinario” que consolida la reputación del Baylor St. Luke’s como referente en la atención de casos clínicos altamente complejos.

Hacia un nuevo estándar quirúrgico

Este logro no solo representa un triunfo técnico, sino una visión del futuro de la medicina: procedimientos más humanos, menos dolorosos y con un impacto mucho menor en la calidad de vida del paciente. Aunque actualmente solo se ha ejecutado un caso en Estados Unidos, los responsables del programa prevén extender esta técnica a más pacientes, convirtiéndola eventualmente en un nuevo estándar asistencial.

El desafío inmediato será formar a más cirujanos en el manejo del sistema Da Vinci, reducir los costos asociados —que superan el millón y medio de dólares por unidad robótica— y establecer protocolos reproducibles en otros centros hospitalarios del país y del mundo.

La cirugía robótica, otrora vista como una herramienta experimental o de lujo, ha demostrado ahora su potencial para salvar vidas y redefinir lo posible.


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el robot operó sin herir la cruz.
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